El Sporting mueve ficha con su guardián

En El Molinón ya se comienza a dibujar el futuro bajo palos. Según informa el medio asturiano Killer Asturias, el Sporting ya ha hecho llegar su propuesta de renovación a Rubén Yáñez. Es el portero que se ha ganado la confianza de todos con su seguridad, reflejos y liderazgo silencioso.

El ofrecimiento no es menor. Un contrato hasta el año 2028. Una muestra clara de que el club quiere cimentar su proyecto desde la portería. Y que ve en Yáñez no solo a su arquero actual, sino al guardián de su identidad durante los próximos años. El gesto también habla de estabilidad, de proyecto a largo plazo y de confianza mutua.

Rubén Yáñez, más que un portero

El meta catalán, que aterrizó en Gijón con el desafío de hacer olvidar a figuras pasadas, ha respondido con creces. Su temporada ha sido de las más regulares dentro del equipo. Y su jerarquía ha sido fundamental en muchos encuentros en los que el Sporting se sostuvo gracias a sus intervenciones.

Pero Yáñez no es solo un seguro bajo palos. Es voz dentro del vestuario. Profesionalidad diaria. Y es también un perfil que encaja con la idea de equipo que se quiere construir en Gijón. Por eso el club se ha adelantado, buscando atar a uno de sus hombres más fiables antes de que el mercado ponga otras cartas sobre la mesa.

El Sporting apuesta por la continuidad

En un mercado cada vez más volátil, el Sporting quiere evitar sobresaltos. Renovar a sus piezas clave es un paso lógico, pero también estratégico. Mantener el bloque que ha funcionado es tan importante como acertar en los fichajes. Y Yáñez representa ese tipo de jugadores que dan estabilidad a un proyecto.

Ahora la pelota está en el tejado del portero. Las conversaciones están en marcha, y todo apunta a que hay voluntad por ambas partes. Si nada se tuerce, Gijón podrá seguir viendo a su número uno bajo palos durante varias temporadas más. Porque en el fútbol, pocas cosas son tan valiosas como un portero de garantías… y de casa.