Elche y Granada, obligados a ganar

El Elche CF y el Granada CF se miden en esta quinta jornada de la Liga Hypermotion con la necesidad de sumar de tres para ambos conjuntos. Los ilicitanos vienen de ser arrollados por el Real Zaragoza, y de sumar únicamente tres puntos de doce posibles en lo que va de competición. Por su parte, los nazaríes llegan con sensaciones parecidas a los locales tras haber sumado cuatro puntos, y con el miedo de descolgarse de la lucha por el ascenso directo.

Un Elche en busca de su identidad

El comienzo de Eder Sarabia al frente del conjunto ilicitano está lejos de ser idílico. Tres derrotas en los cuatro primeros partidos, y la sensación de ser un equipo desnortado y sin identidad propia. Han sido numerosos los fallos que han condenado al Elche en estas primeras jornadas. Desde errores de Dituro, hasta la falta de gol en área contraria, pasando por una pobre salida de balón. Sin embargo, Sarabia sigue creyendo en su idea de juego.

Para el duelo ante el Granada, el técnico vasco no podrá contar con los lesionados Aleix Febas y Yago de Santiago. Ni con el sancionado Óscar Plano, especialmente sensibles estas dos últimas ya que son dos de los futbolistas con más gol de la plantilla.

El Granada intentará volver a hacerse con los 3 puntos lejos de Los Cármenes

A pesar del mal comienzo del conjunto nazarí, Guillermo Abascal confía en la mejora del equipo y asegura que poco a poco se van viendo buenas actuaciones durante los encuentros, aunque los resultados no terminen de llegar. A estas mejoras, y la vuelta de sus jugadores internacionales, se acogerán los de la ciudad de la Alhambra para recuperar las buenas sensaciones y hacerse con la victoria.

Respecto a los jugadores que no estarán disponibles para el técnico sevillano, Martin Hongla, que se reincorporó “tarde” de los compromisos internacionales, y Lucas Boyé, por un golpe costal, se unen a Luca Zidane, cuyo tiempo de recuperación sigue siendo “indeterminado”. Esta situación ha provocado que el conjunto haya optado por unir a sus filas a Diego Mariño, que llegó como agente libre.