Vasyl Kravets, una aguja para Gijón
Un nuevo verano se presenta ante nosotros. Tiempos de actividad para el balompié, que aún malogrados por las dificultades económicas del COVID, nos ofrecerán multitud de esperanzas e incógnitas. De hecho, a estas alturas son varios los clubes que han hecho oficiales nuevas llegadas. En Gijón los ven por el momento desde la barrera, aunque parecen tener una bala en la recámara. Si lo que apunta la prensa asturiana llega a buen puerto, Vasyl Kravets llegaría al Molinón para reforzar los carriles rojiblancos. Una aguja que puede -y debe- confeccionar fútbol para el equipo de Gallego.
El Sporting necesita un lateral izquierdo
El vencimiento del préstamo de Saúl García dejará virgen una posición habitualmente complicada para reforzar cada verano. El único nombre presente es el de un Pablo García que aún está trabajando en su asentamiento a la categoría. Al joven futbolista de Mareo, eventual en los onces de David Gallego, no parece que se le vaya a asignar el rol de titular en la banda zurda.
A falta de efectivos ha surgido con intensidad el rumor de un viejo conocido en la categoría de plata: Vasyl Kravets. El lateral ucraniano, que militó como cedido en el Lech Poznan polaco la temporada pasada, no parece contar para el Leganés en la 21/22. Otro año más el club pepinero deberá buscarle un destino en el que pueda jugar y tener confianza para disfrutar de su fútbol. Si todo se confirma, parece que ese sitio será Asturias. Un encuentro que tiene sentido para ambas partes.
Kravets, un lateral consolidado
Kravets se hizo con un nombre en la categoría tras su paso por el Club Deportivo Lugo. En tierras gallegas conoce el fútbol español, se familiariza con él y muestra buena parte de su potencial. Fue protagonista en muchos de los buenos momentos de los albivermellos en una época convulsa. Un paso exitoso y destacado que a la postre le valió el fichaje por el Leganés. Aunque en las últimas campañas no ha encontrado su sitio en LaLiga SmartBank -más allá de una media temporada de regreso a Lugo- es un nombre del que se espera que pueda sumar y cumplir en prácticamente cualquier equipo de la división.
Vasyl Kravets, a sus 23 años, es aún un futbolista de mucho potencial, que puede llegar a grandes cosas dentro del fútbol español. Juventud y tablas de las que no muchos laterales izquierdos pueden presumir. En una demarcación que acostumbra a ser difícil de cubrir el ucraniano se nos presenta como una oportunidad interesante. Lateral izquierdo zurdo prácticamente cerrado, peculiar por su perfil y por sus características, que no casan con la de otros compañeros de posición.
La aguja de Lviv
Los mejores sastres siempre ponen su firma téxtil con aguja de plata. Kravets, en este sentido, es una aguja de la que muchos técnicos pueden echar mano. Sus centros son hilos para envolver y nutrir a los delanteros. Para causar enredos a las defensas rivales. Sus envíos con zurda son su mayor virtud y su marca personal. Cuando recibe abierto cerca del área pone el ojo en los posibles remates y cuelga con frialdad. Punza con finura sobre el área y ayuda a que sus compañeros perforen. Un acierto con la zurda que también le ha servido para ser ejecutor a balón parado en según qué partidos o equipos.
Vasyl suele funcionar desde un rol más bien estático, recibiendo y apoyando. No es un encarador, no es común verlo atacando la línea de fondo o dividiendo individualmente a rivales. Progresa mediante la combinación y el juego en contextos posicionales, abierto para recibir y devolver. Mediante paredes, incluso. No es un futbolista que brille por acciones de dinamismo o de explosividad en términos individuales. Se presenta taimado -aún teniendo virtudes físicas- y seguro. Valioso buscando envíos largos hacia la ruptura o explorando el pase exterior.
Por otra parte, en aspectos defensivos nos referimos a un lateral más activo. Físicamente cuenta con cierta constitución para acosar e importunar encima al extremo o atacante rival. No va mal en la barrida al balón, es seguro en el tackle. Además de ello, no está falto de velocidad para cubrir espacios anteriores y corregir sus espaldas. Es un lateral de mucho empaque, completo, que aguanta bien las tretas individuales y que fomenta al orden del bloque defensivo con su buen hacer.
Cimientos para competir
Es una circunstancia curiosa la de Vasyl, dado que probó opositar a un equipo de cotas superiores en Segunda tras su paso por el Lugo -en un tramo irregular-, pero aún no ha contado con una oportunidad en un proyecto de esas aspiraciones. Pudo arañar ciertos minutos en Primera en Butarque, pero nunca con regularidad. Debemos ver al ucraniano en un reto de ese rango para con precisión tasar sus capacidades en un contexto de las exigencias del Sporting de Gijón.
Si la cesión de Kravets llega a buen puerto llegará al Molinón un lateral que debería ser capaz de cumplir con ese compromiso y ese nivel. A priori, es un escenario idóneo para ambos. Vasyl debe probarse a ese nivel como titular y el Sporting puede ofrecérselo ante la falta de efectivos en la banda izquierda. De llegar, Gallego contará con una aguja con la que poder tejer un nuevo camino hacia el éxito. En los centros del lateral podrían vivir muchos de los puntos del conjunto asturiano en la campaña que viene. Pie de carne y hueso, balones bordados en plata de ley.
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