El estado de ánimo es sin duda una de las mayores fortalezas que puede tener un equipo. Y tanto Éibar como Real Oviedo llegan al encuentro que los va a medir en Ipurúa con la flechita hacia arriba. Los armeros, exultantes, tras haber logrado remontar sus últimos dos encuentros en los últimos minutos sumando así sendas victorias y consolidándose en zona de playoff. Los carbayones porque acumulan ya cinco encuentros consecutivos sin perder, habiendo encajado tan sólo un tanto y comenzando a hacer del «unocerismo» una forma de vida. Partido cerrado el que se espera vivir en Éibar en el que, a buen seguro, un detalle puede ser la clave que lo desatasque todo.

Garitano resiste en un momento crítico

El técnico pasaba a finales de noviembre por un momento realmente crítico tras caer derrotado ante el Cartagena. Todas las miradas se dirigían al banquillo, motivo aparente de cualquier mal, muy castigado desde que la temporada pasada no se consiguiera alcanzar el ascenso. Desde entonces, dos remontadas exprés ante Huesca y Burgos que vuelven a estabilizar al equipo en zona de playoff. Regreso a la senda de la seguridad defensiva y el resultadismo. Todo en orden.

Para recibir al Real Oviedo, cuenta Garitano con las dudas de jugadores que vienen siendo baja en los últimos encuentros, como Frederico Venancio, Quique González o Ager Aketxe. Por lo demás, tiene a toda la plantilla presta y dispuesta para volver a comportarse como una máquina competitiva que jamás le pierda la cara al partido. Eso es lo que cabe esperar de este equipo.

Cervera y el unocerismo ilustrado

Si hablamos de Álvaro Cervera, muchos ya tendrán claro que nos encontramos ante un entrenador eminentemente práctico. Uno de aquellos que desea que su equipo se atreva tan sólo con aquellos aspectos que domina y de ninguna forma lo haga con aquellos otros que le saquen de su zona de confort. Y eso ha instaurado en Oviedo desde su llegada para sustituir a Jon Pérez Bolo. El Real Oviedo ya no es aquel equipo frágil  al que lastimaban a la mínima de cambio. No, aquello acabó.

En los últimos 5 partidos ligueros, tan sólo un gol encajado con tres victorias por la mínima. Fútbol ‘made in Er Gafa’. Para la visita a Ipurúa siguen siendo baja por lesión Sangalli, Montoro y Javi Mier; por contra, recupera a Luismi para la medular tras cumplir sanción por acumulación de amonestaciones. Con Koba esperando su alternativa, el once no debería presentar demasiadas variaciones respecto al que se pudo ver ante la UD Las Palmas.