Hay entrevistas y entrevistas. Y en la noche del lunes, José Manuel Naranjo y Jaime Mateos nos dejaron una de aquellas que conviene repasar con detalle, con pausa… Disfrutarla sin más.  Una charla distendida, natural y sincera con varios titulares pero sobre todo con ritmo y actualidad.

Y es que José Naranjo se pasaba por Camino al Cielo, programa producido por Fondo Segunda para Radio Marca, justo el día después de la victoria de la Ponfe ante el Lugo en una semana en la que el equipo parece haber ofrecido una mejoría. «Durante la semana tuvimos el partido del Levante que acabamos con sensaciones muy positivas. Teníamos que hacer bueno ese punto y lo conseguimos». Obviamente, esa mejoría se ha de relacionar con la llegada de un nuevo técnico, que ha intentado cambiar cosas para hacer que el equipo funcione: «David Gallego lleva haciendo un trabajo importante desde que ha llegado. Es cierto que los primeros resultados no nos acompañaron, pero se está viendo un cambio con lo que él quiere y nos estamos adaptando. Ahora tenemos que alargar esta buena racha en el tiempo».

En contraposición, el parón de Navidad está cerca y esto «es posible que no nos beneficie, pero también tenemos más tiempo para preparar los partidos, insistir en la idea del entrenador y seguro que saldremos reforzados y vendrán buenas actuaciones como esta última». No podíamos pasar por encima de  la actualidad y de esa expulsión que sufrió estando en el banquillo tras ser sustituido. Una expulsión que, según contaba el futbolista, «para mi no es motivo de expulsión. El balón llega hacia en el banquillo, lo cojo y lo lanzo hacia un lado. Se forma un revuelo, pero evidentemente no es para roja. Se recurrirá porque en las imágenes es claro que no retengo el balón ni quiero confrontar a los dos equipos. A ver lo que deciden».

Pero… ¿en qué se puede basar el departamento jurídico del club para demostrar que no sucedió lo que se redactó en el Acta? Naranjo lo argumenta así: «en el vídeo se denota que ni retengo el balón ni me resisto. Es simplemente algo de picardía que ni mucho menos es para tarjeta roja. Hay muchas acciones similares y no se sancionan. Me parece excesivo, pero no hay que darle mayor importancia. Se recurrirá y ver qué dictaminan»

Y a raíz de todo ello, se introdujo el debate sobre el elevado número de expulsiones que se está viviendo en esta temporada en nuestro fútbol en general y en la competición en general. «Yo creo que el nerviosismo persiste. Deberíamos ayudarnos todos más, tanto los jugadores como los árbitros en común»

Un momento dulce en lo personal

Estamos teniendo la ocasión de volver a ver a un José Naranjo con buenas prestaciones que, salvando las distancias, recuerda a aquel que nos enamoró en las filas del Nàstic hace algunos años. «Siempre tengo la ilusión de intentar hacerlo lo mejor posible. Todo lo que pueda aportar siempre lo va a agradecer el equipo y también me gustaría superar las cifras que hice en el Nàstic». Y en el punto de mira, un contrato, el suyo, que tiene fecha de caducidad: el 30 de junio de 2023. «Es pronto todavía. Mi único objetivo es ayudar al equipo para que vaya hacia arriba. Cuando la cosa vaya mejor ya hablaremos del futuro y de lo que tenga que venir. Yo estoy a gusto en Ponferrada. He pasado buenos y bonitos momentos aquí que eso se palpa y se nota»

El objetivo, siempre, rendir alto y ayudar al colectivo, siendo conscientes de la dificultad. «En Segunda todos los partidos se deciden por detalles. Estuvimos toda la temporada entre los seis primeros y al final por detalles no entramos en el playoff. Orgullosos de esa temporada y en esta daremos lo máximo para acabar como queremos»

Los malos momentos y el lado más personal

«José Gomes nos dijo que no habían salido las cosas como tenía previsto y esperábamos todos y que esperaba que con otro entrenador pudiésemos salir de ahí. Es digno de admirar que tomase esa decisión porque no es común. Es un gran profesional y una buena persona. En el fútbol como en la vida si vas de frente acabarás bien con todo el mundo«. Así resumía un poco José Naranjo lo acaecido en el momento de la dimisión del técnico que empezó la temporada en la Ponferradina y su relación con él. Y es que el inicio de temporada fue convulso para el equipo. «Bajo mi punto de vista es la falta de confianza y delante de nuestra afición tenemos esa cierta desconfianza y esas dudas que se convierten en dinámica negativa. Tenemos que hacer que de este Estadio no se nos escape ningún punto«.

En el plano personal, nos encontramos con un José Naranjo al que «me gusta leer bastante, el tema de inversiones… me estoy formando día a día y a eso es a lo que me dedico en el tiempo libre. El tema de finanzas y demás me gusta mucho y creo que me puedo dedicar a ello en el futuro. De entrenador no me veo en el futuro. En el fútbol sí, pero en otro apartado aunque con el tiempo todo puede cambiar».