Un delantero es la prioridad, pero el Granada no descarta fortalecer el centro del campo. Una de las opciones que más atrae al cuadro nazarí en este sentido es el de Mickäel Malsa, que busca una salida del Real Valladolid para contar con más minutos.

Trasvase desde Pucela por partida doble

Poco tránsito se ha producido hasta el momento en las puertas del Nuevo Los Cármenes, pues, aunque el Granada CF ha conseguido encontrarle acomodo a Antoñín, aún se esperan movimientos en el capítulo de llegadas. La prioridad pasa por buscar a dos delanteros que puedan subir las cifras goleadoras de un equipo que no consigue asentarse del todo en zona de play-off. Arezo no convence y Jorge Molina no puede cargar con todo el peso ofensivo como único delantero centro de referencia. La opción de reclutar a Shon Weissman como cedido desde el Real Valladolid parece haber ganado peso en los últimos días, aunque el delantero israelí puede llegar acompañado desde Pucela.

La opción que coge más fuerza

El centro del campo es la otra zona que pretende reforzar el Granada y, ante la negativa que se ha encontrado con Jaime Seoane, ha aparecido con fuerza el nombre de Mickäel Malsa para recalar cedido desde el Real Valladolid. El centrocampista francés se encuentra en la rampa de salida ante la falta de oportunidades en el cuadro blanquivioleta, por lo que busca una salida en el presente mercado invernal. Su idea inicial es mantenerse en un equipo de Primera División, pero el creciente interés del Granada por hacerse con sus servicios puede hacerle cambiar de opinión: en el Nuevo Los Cármenes tendría más minutos a las órdenes de un Paco López que le conoce bien después de coincidir en el Levante UD. A estas horas, el Granada CF parece el destino más probable para Malsa.