Lugo, un refuerzo confirmado y otro a la espera

El CD Lugo se encuentra en un momento delicado, en el que ya ha pasado el efecto Fran Justo y, tras él, el paisaje parece desolador. El equipo se hunde en la clasificación y no logra resultados positivos, lo que deja la zona de salvación a cuatro puntos. El equipo parece necesitar refuerzos, aunque el margen salarial tampoco ayuda. Así, toca moverse con cautela aunque con premura. La dirección deportiva ha logrado incorporar, de momento, a un extremo de proyección y tendría cerrado un lateral zurdo para suplir la salida de Lebedenko que llegaría, precisamente, desde el destino del futbolista ucraniano.
Javier Avilés, extremo con proyección para los lucenses
Así, el club acaba de anunciar la incorporación en calidad de cedido de Javier Avilés. Se trata de un extremo que desde categorías inferiores ha prometido mucho y en el que el CD Leganés depositó grandes esperanzas pero que, hasta el momento, no ha terminado de explotar. Ha realizado actuaciones realmente espectaculares como pepinero aunque, por desgracia, se han perdido entre otras bastante flojas y entre grandes períodos en los que no ha gozado de oportunidades con el primer equipo.
A sus 25 años, es ahora o nunca para él si desea terminar asentándose en el fútbol profesional. Y el Lugo le ofrece una oportunidad realmente interesante para que pueda aprovecharla y dar ese salto hacia la regularidad que se le pide para instalarse. Como avanzábamos, se trata de un extremo con descaro, desborde y verticalidad que puede ayudar en fase ofensiva al conjunto albivermello a mejorar sus prestaciones de cara al gol.
Héctor Hernández, pendiente de autorización
Por otro lado, la salida de Orest Lebedenko genera un problema en la plantilla, que queda únicamente con Zé Ricardo como lateral izquierdo. Por ello, la dirección deportiva se ha movido con premura para encontrarle sustituto y ya lo habría cerrado. Se trata de Héctor Hernández, que ya tiene experiencia en Segunda División con equipos como Tenerife o Numancia, además de haber hecho trayectoria en Primera División, siendo la Real Sociedad uno de los equipos con los que más apareció en la máxima categoría.
A sus 31 años, el jugador llegaría desde el RC Deportivo de la Coruña, que precisamente fue el destino del lateral ucraniano. El fichaje está pendiente de que LaLiga autorice el mismo, ya que el conjunto lucense no cuenta con demasiado margen salarial y la operación estaría al límite para poder ser tramitada de forma oficial.
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