Crónica Jornada 6 LaLiga Hypermotion

La Jornada 6 de LaLiga Hypermotion viene cargada de partidazos. Como siempre. Quizá el más destacado o llamativo, el del Real Zaragoza frente al Levante UD. Pero todo empieza con un derbi andaluz extraordinario. Esta es la Crónica Jornada 6 LaLiga Hypermotion. Con lo más destacado de cada partido. Y con las notas de los jugadores para Futmondo.


En el Nuevo Los Cármenes se iba a disputar un partido donde se presumía un ambientazo. Y así fue. Se enfrentaban un Granada que sin duda ha comenzado la temporada de una manera inesperada para ser un recién descendido y un Málaga que, a pesar de ascender la temporada pasada, todavía no conocía la derrota. El conjunto local llegaba tras un empate contra el Elche, mientras que el visitante venía de ganar en casa al Huesca.

El encuentro comenzó sin gran propuesta por parte de ninguno de los dos equipos. Un juego poco vistoso, donde el Málaga fue de menos a más ganando terreno. Con una gran actuación del jovencísimo Aaron Ochoa, que tuvo la más clara en un mano a mano. En los minutos finales de este primer tiempo, el Granada comenzó a imponer su juego con dos grandes jugadas de Tsitaishvili, pero que no llegaron a nada. Y de esta manera se llegaría al descanso con el resultado inicial.

El derbi no defrauda, descontrol y muchos goles

La segunda parte comenzó con un claro dominio nazarí. Con varias ocasiones de peligro, pero sin encontrar portería. Hasta el minuto 55, cuando Carlos Neva marcó un golazo tras un centro lateral. Tan solo 5 minutos después, tras una mala salida de balón por parte del Granada, el Málaga consiguió poner la igualada en el marcador, con un definición impecable de la joven perla malagueña, Antoñito. Tras esto el partido poco a poco se fue calmando, sin ocasiones de gran peligro. Hasta que en un centro lateral aislado, Uzuni consiguió empujar el balón al fondo de la red para poner de nuevo al conjunto nazarí por delante.

Ya en los instantes finales, en el descuento, tras la ejecución de un córner, fue Nelson Monte el que consiguió rematar el balón y poner de nuevo el empate en el marcador. Y fue precisamente éste el que provocó un penalti en el último minuto, que tras el disparo de Weissman, consiguió detener Alfonso Herrero. De esta manera, y con el empate, el colegiado pitó el final en un partido que se volvió loco y que no dejó indiferente a nadie. Que coloca provisionalmente 5º al Málaga con 10 puntos y 12º a un Granada que con 6 puntos viajará a Burgos para afrontar la jornada 7.

Notas del Granada - Málaga perteneciente a la Crónica Jornada 6 de LaLiga Hypermotion

La primera parte no tuvo grandes ocasiones para ningún equipo. Fueron unos primeros 45 minutos soporíferos, sin grandes ocasiones para nadie. Muy poco que rescatar.

Justo al empezar la segunda parte, un buen centro de Álvaro Rodríguez fue rematado en plancha por Juanma. Subía el 0-1 al marcador. En el minuto 72 empató el Racing de Ferrol, en una gran jugada a balón parado. Pero pronto, cinco minutos después, Higinio anotó un gran gol tras un espectacular autopase. El Racing de Ferrol se intentaba lanzar arriba para empatar, pero en el minuto 91 una buena contra fulminaba el encuentro con un gran gol de Javi Rueda. Y en el 96, con un gran tiro desde fuera del área, Alcedo ponía el 1-4 que sería el resultado definitivo.


El caos fue el protagonista de la primera parte en el Nuevo Pepico Amat, pasó prácticamente de todo. Empezó mejor el Eldense, siendo muy vertical con balón y no dando opciones a los visitantes a campo abierto. En el minuto 10, el conjunto alicantino pidió roja por un planchazo de Hassan y penalti por mano de Oier Luengo, el árbitro no consideró punible ninguna de las dos acciones. Juanto Ortuño pudo poner por delante a los suyos hasta en dos ocasiones, pero no estuvo acertado en la finalización. El Real Oviedo despertó con el paso de los minutos, tras un aviso de Seoane y un centro-chut de Lemos, Alemao se sacó de la chistera una volea por toda la escuadra para adelantar al cuadro asturiano. Dos minutos después, Marc Mateu pusó un córner que Dumić remató al fondo de las mallas, Oier Luengo pidió falta del defensor bosnio, pero desde el VAR se dio validez al tanto del conjunto local.

Nada más salir del vestuario, en la primera ocasión de la segunda mitad, Víctor Camarasa pudo poner por delante a los suyos, contra su ex equipo, en un remate cruzado que se fue cerca del palo izquierdo. Después de ese intento, el partido entró lemtamente en una fase muy trabada con muchas interrupciones y poco ataque, los entrenadores intentaron desatascar esta situación con cambios. Cazorla entró y el Oviedo se hizo con el control de la pelota, no obstante, el dominio no se traducía en llegadas. Por su parte, el Eldense esperaba en bloque medio para cazar a los visitantes en una transición. Cerca del final, Mackay dudo en un centro y el balón le cayó a Dotor, el centrocampista madrileño falló con todo a favor, no se esperaba recibir ese balón. Nada más entrar al campo, ya en el descuento, Simo regateó a dos defensas y en el mano a mano se topó con un Escandell que se hizo enorme. Con el partido prácticamente terminado, Godoy vio la roja en un encontronazo con Dotor.


El partido comenzó con una ocasión para Álex Sancris, tras un saque de banda rápido que llegó a los pies de Florian de Miguel. Este centró por bajo, Sancris remató, y el balón rozó el palo. En el minuto 35, Appin recuperó el balón y lo cedió a Miguel, quien centró de nuevo, permitiendo que Edu Espiau cabeceara un balón que sorprendió a Leite, pero se fue rozando el travesaño. El Deportivo apenas inquietó la portería de Cantero en la primera mitad, mientras que el Burgos dispuso de las ocasiones más claras.

En la segunda mitad, el Deportivo comenzó con una clara ocasión tras una jugada entre Mella y Yaremay, cuyo centro fue rematado por Bouldini, aunque se fue por poco. En el minuto 57, Bouldini volvió a tener una oportunidad tras un buen desmarque de Ximo Navarro, pero su disparo se fue alto. En los últimos diez minutos, el Burgos generó peligro nuevamente con un gran regate de Morante, quien asistió a Sancris. Pipa centró para que Curro rematara, pero el balón se fue fuera por poco.

El gol del Burgos llegó tras un error grave de Petxa en los minutos finales, que permitió a Sancris regatear y marcar con su pierna buena. Con el tiempo cumplido, el árbitro pitó un penalti a favor del Burgos tras una falta dentro del área. Curro, con calma, anotó el segundo gol desde los once metros, colocando el balón cerca de la escuadra. El partido concluyó con un Burgos sólido y líder provisional, mientras que el Deportivo sigue mostrando dudas.


La Romareda era protagonista del duelo por el liderato entre Real Zaragoza y Levante UD, dos conjuntos que buscan volver a la máxima categoría a final de temporada. El encuentro arrancaría con la llegada de Mario Soberón desviada por la defensa en el primer minuto, los primeros minutos fueron un monólogo local con la posesión del esférico. Poco a poco el conjunto azulgrana se quitaría esa presión hasta el punto de llegar a incluso marcar con el disparo final de Carlos Álvarez tras recoger el rechace pero se encontraría con la mano de Poussin, en la portería contraria Francho caería dentro del área y el colegiado señalaría pena máxima que transformaría sin dudarlo Mario Soberón para adelantar al Real Zaragoza.

A balón parado buscaría el Levante la igualada con el cabezazo desviado de Kochorashvili a la izquierda de la meta local, respondería Adrián Liso con un potente lanzamiento desde la frontal rechazado por el poste cuando Andrés Fernández ya había sido superado por el esférico. Llegaría la polémica a La Romareda con el gol fantasma marcado por Morales que tras revisión del VAR sin una imagen clara dieron el tanto de los visitantes pese a la indignación de jugadores y afición local. Con el empate en el marcador se llegaría al entretiempo en un duelo que nos estaba dejando a dos equipos que querían ganar como fuera.

El segundo tiempo arrancaría con la llegada al partido de Clemente en sustitución de Tasende. Adrián Liso buscaría su gol con un lanzamiento desviado de la meta defendida por Andrés Fernández. Superada la hora de juego, Iván Calero estaría cerca de marcarle al equipo de su padre, Julián Calero, pero el travesaño le negaría el tanto al lateral derecho. Tras una larga ronda de recambios desde el banquillo llegaría la ocasión del conjunto valenciano, Brugué pondría un balón dentro del área al que no lograría llegar ningún compañero. Cuando todo parecía que iba a terminar en tablas apareció Bazdar para dar la victoria al conjunto aragonés con un trallazo que entraba para delirio de la grada y frustración rival.

Con esta victoria el Real Zaragoza recupera el liderato perdido la semana anterior antes de visitar El Molinón, por su parte el Levante UD es cuarto y recibirá al Almería en un duelo que bien podría ser de Primera División.


El partido comenzó con un tímido cabezazo de Juande Rivas tras un saque de esquina ejecutado por Luismi Cruz, que fue la primera aproximación del Tenerife. Posteriormente, el Sporting respondió con fuerza, generando una gran ocasión en la que Salvi Carrasco realizó una parada magistral, después de que Dani Queipo se quedara solo frente al guardameta tinerfeño. Poco después, en el minuto 25, Luismi Cruz rozó el gol tras ejecutar un tiro libre que se marchó muy cerca del poste. La siguiente jugada polémica la protagonizó Enric Gallego, quien se plantó solo frente a Yáñez, pero inexplicablemente decidió retrasar el balón en lugar de rematar a puerta, desaprovechando una clara oportunidad.

El marcador se abrió finalmente con un gol de Rober Pier, quien aprovechó un balón suelto en el área para colocarlo cerca de la escuadra, superando a Salvi Carrasco y poniendo el 1-0 a favor del Sporting. Así concluyó una primera mitad en la que ambos equipos mostraron destellos, pero sin un dominio claro por parte de ninguno.

La segunda parte inició sin muchas acciones destacadas, con ambos conjuntos cautelosos y sin arriesgar demasiado. No fue hasta el minuto 71 cuando llegó una nueva oportunidad clara, esta vez para Maikel Mesa, quien se quedó solo ante el portero pero su disparo terminó en las manos de Salvi Carrasco, perdiendo una ocasión de oro para aumentar la ventaja. Sin embargo, en el tramo final del encuentro, en el minuto 83, el Tenerife consiguió igualar el marcador tras un remate de cabeza de Diarra en un saque de esquina que batió a Rubén Yáñez, poniendo el 1-1 definitivo en el marcador.

El partido concluyó con un empate que deja mucho trabajo por delante para Pepe Mel. Jugadores clave como Enric Gallego o Waldo no están rindiendo al nivel esperado, algo que el técnico madrileño deberá solucionar cuanto antes si quiere mejorar los resultados del equipo. Por su parte, el Sporting continúa sin encontrarse a sí mismo, mostrando una versión que no convence a su afición.

El partidazo de Castalia no defraudó en absoluto. La primera mitad fue una batalla de tú a tú en la que ambos porteros se erigieron en protagonistas. Ezkieta quizá tuvo más carga de trabajo, aunque cuando apareció Crettaz dejó la sensación de ser más determinante por la dificultad de sus intervenciones. Cuando Íñigo Vicente, Andrés Martín y Arana se encontraban, el Castellón sufría en defensa. Por su parte, el Castellón presionaba arriba, dominaba el balón y llegaba a las inmediaciones de área con frecuencia. Sus disparos, eso sí, eran o demasiado inocentes o desviados. Aún así, se llegó sin goles al descanso. Las espadas en alto para la reanudación.

La segunda mitad comenzaba con Mario García presionando la salida de Mamah, recuperando y el futbolista del Castellón derribando al lateral. Penalti que era transformado por Andrés Martín para dar ventaja a los cántabros. Había entrado al terreno de juego Karrikaburu, que tuvo una de las más claras ocasiones del Racing para haber dejado cerrado el partido. Por su parte, también tuvo las suyas para empatar el Castellón, especialmente una de Seuntjens que Ezkieta salvó con el pie izquierdo. Lo intentaría hasta el final el conjunto local, pero los tres puntos y el liderato se fueron para Santander.


El Cádiz saca la cabeza a costa de un Cartagena sumido en una crisis profunda. El triunfo de los amarillos en tierras murcianas, la segunda fuera de casa, deja el futuro de Abelardo como técnico en Cartagonova colgando de un alambre, ante la imposibilidad de reconducir el rumbo de un equipo que, en el encuentro ante los andaluces, mostró de nuevo una versión decepcionante. Incapaz de crear lo suficiente en ataque, y frágil en la línea defensiva, como lo demostró en el primer gol del partido, marcado por Chris Ramos. El delantero del Cádiz fue un martillo que desequilibró a su rival a base de continuos machazos, especialmente en una primera parte donde se sintieron cómodos los de Paco López, al que le tocó celebrar los goles de su equipo desde la grada por cumplir su primer partido de sanción. Le tocó remar a contracorriente al Cartagena, aunque, el camino se le empezó a allanar; por mérito propio, sí, aunque más bien por demérito de su rival. Tras el descanso, el Cádiz fue, como dice la conocida expresión, el camarón que se durmió para terminar siendo arrastrado por la corriente.

Salió a la reanudación totalmente irreconocible, como si fuese un deja vù de ese equipo de la jornada pasada ante el Racing de Ferrol. Ese contexto de flaqueza demostrada, fue del que sacó partido el Cartagena para respirar más aliviado con un trallazo inapelable de Luis Muñoz que destrozó el fondo de la portería defendida por un David Gil que, a excepción del gol recibido, estaba completando una actuación de un nivel absolutamente sublime. Pero no supo ahondar en esa misma línea. El Cartagena entró, con el paso de los minutos, en un estado de avanzado descomposición ante un Cádiz que, por el contrario, apretó los dientes hasta ponerse nuevamente por delante. Chris Ramos, que lo estaba ganando absolutamente todo por arriba, cabeceó un centro servido por Iván Alejo para salir al rescate. Nueva salida fuera de casa, y nueva victoria para el Cádiz que se sitúa como uno de los mejores conjuntos a domicilio. La derrota, se la quedó el Cartagena, que esta semana podría vivir un auténtico terremoto en su banquillo, con Abelardo Fernández como principal damnificado


El Elche se adueñó de la posesión del balón desde el inicio del encuentro, aunque no se podía esperar otra cosa de un equipo de Eder Sarabia. Fruto de ello, fueron cayendo las llegadas al área. Diaby, Bigas y Sory Kaba hicieron intervenir a un seguro Raúl Fernández; Salinas, Nico Castro o Bigas, de nuevo, lo intentaron sin encontrar portería. El Mirandés no se descompuso, pero apenas encontró la forma de llegar a área contraria. Tan sólo Lachuer tuvo opción en un disparo que salió rozando el palo.

Nico Castro y Agustín Álvarez volvieron a exigir a Raúl Fernández en el inicio de la segunda mitad. Y por fin, a mitad de la segunda mitad, Mourad anotaba en un centro lejano de Diaby. A partir de entonces, el Mirandés se trató de estirar si bien apenas logró crear peligro a los ilicitanos. Pudo ampliar el Elche a la contra, especialmente con un disparo de Nico Castro al que volvió a responder Raúl Fernández. Triunfo merecido del Elche, que rompe el invicto del Mirandés y sale de la zona baja.


El Almería volvió a ver cómo le visitaban los fantasmas, pero logró salvar los muebles con voluntad y, por momentos, buen fútbol. Y es que el Eibar, que dificultó mucho el juego a los locales en la primera mitad, se fueron al descanso en ventaja. Una vez más, a la salida de un córner, en esta ocasión al segundo palo, los de Etxeberría se ponían por delante. El castigo era duro para el conjunto indálico, pero todo lo que podía salir mal volvía a salir así. De hecho, al filo del descanso parecía que llegaba el empate con gol de Luis Suárez, pero el fuera de juego previo de Melamed hacía que el gol fuese anulado.

En la segunda mitad, el Almería volvía a comenzar dominando y llevando el peso, pero se volvía a llevar otro golpe en una contra en la que Puertas apuraba línea de fondo y Alkain la empujaba a la red. En esta ocasión, la afición no le daba la espalda a su equipo y empujaba a su equipo y, muy pronto, Melamed acortaba distancias. Eso ayudó en todo al equipo local, que fue empujado por la gente y buscó el empate hasta encontrarlo en las botas de Rachad, que había entrado como revulsivo. Aún quedaban 10 minutos más el descuento, que fue largo. Y lo intentó de muchas formas el Almería para llevarse la victoria en remontada. Tuvo ocasiones, hubo opciones y terminó el descuento con uno más, pero no logró voltear el marcador. Aunque quizá sí se encontró un poco más a sí mismo.


El Huesca fue un ciclón para el Córdoba en El Alcoraz y es que a la media hora ya había colocado el 3-0 en el marcador. El Córdoba se plantó con una filosofía ofensiva y de toque. El Huesca, por su parte, se dedicó a dañar al rival. Con jugadores como Gerard Valentín, que provocaba el penalti que supuso el 1-0, anotado por Sielva. A balón parado hacía el segundo Joaquín, tras un córner que caía en Gerard Valentín para que éste fuese de nuevo crucial con su centro. Era el minuto 29 y en la siguiente jugada, Vilarrasa y Kortajarena combinaron para que Sergi Enrich anotase el tercero. Adilson iba a recortar distancias antes del descanso, para dar un poco de esperanza a los blanquiverdes.

De hecho, y pese a que el Huesca había tenido dos para el cuarto, el Córdoba terminó asediando la portería oscense. Tras el descanso, el Córdoba siguió revitalizado. Tuvo varias ocasiones e hizo intervenir a Dani Jiménez. Sin embargo, cuando más cerca parecía de recortar distancias, le cayó otro mazazo. Fue en el minuto 89, cuando Jordi Martín cerraba la goleada con un disparo desde la frontal. Terminó con uno menos el Córdoba, además, por expulsión de Martínez. Pero ya estaba todo decidido y el Huesca volvía a la senda de la victoria, dejando a su rival en la zona baja.

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