En el sur, el sol brilla con intensidad. Pero esta vez no lo hace solo sobre el Mediterráneo. También ilumina el nombre de Luis Suárez. El goleador de la UD Almería podría estar ante el mayor salto de su carrera. Según informa Diario AS, el colombiano habría despertado el interés de un club que apunta alto: el Sporting de Lisboa.
El equipo portugués se prepara para un posible adiós doloroso. Su delantero estrella, Viktor Gyökeres, desea salir rumbo al Manchester United. Y aunque los portugueses parten de una petición de 70 millones de euros, hay un pacto con el jugador que facilitaría su marcha. Por eso, en Lisboa ya buscan su relevo. Y el primer nombre sobre la mesa es el del artillero almeriense.
El Almería, ante una oportunidad histórica
No es la primera vez que Suárez está en el radar de equipos potentes. Pero ahora, por primera vez, el interés llega con fuerza y contexto. El Sporting necesita gol, potencia y experiencia. Y Suárez ha demostrado que tiene todo eso. Su entrega, su carácter y su instinto en el área lo han convertido en bandera de un Almería que no pudo conseguir el ascenso. Luchó con todas sus fuerzas, sin poder contar con el colombiano en el playoff. Y cayó.
El club almeriense, consciente de su valor, ha tasado su salida en 25 millones de euros. Una cifra que podría no ser un obstáculo para los portugueses si se concreta la venta de Gyökeres. Según el periodista Fabrizio Romano, el interés del Sporting por Suárez es real. Y va en serio. El movimiento podría darse en cuestión de semanas, si las piezas encajan.
Un nuevo reto para un delantero de raza
Luis Suárez llegó a Almería para marcar diferencias. Y lo ha hecho. Pese a los momentos difíciles, nunca se escondió. Su compromiso con el escudo, su entrega constante, lo han colocado como uno de los jugadores más queridos por la afición. Pero a sus 27 años, sabe que el tiempo de dar un salto puede haber llegado.
Jugar en un equipo con aspiraciones Champions, en una liga de escaparate como la portuguesa, puede ser ese siguiente paso que tanto ha buscado. Mientras tanto, en Almería se aferran a la realidad. Si se va, lo hará dejando un legado. También por haberse convertido en máximo goleador de Segunda en la última temporada. Y si se quedara, improbable, será el líder de una reconstrucción con hambre de regreso.
