El Tenerife, inmerso en la lucha por la salvación, muestra su disconformidad con los arbitrajes recibidos las últimas fechas mediante la figura de Álvaro Cervera.
Un objetivo inesperado a principio de año
La temporada del Tenerife está siendo insólita en todos los ámbitos. Está la situación deportiva, en la cual el equipo marcha con 33 puntos en vigésima posición. Algo que parecía imposible, pero que se ha convertido en realidad. La salvación es el objetivo a lograr por los canarios en este final de temporada.
Si alguien puede lograr la heroica, ese es Álvaro Cervera. El guineano llegó el 23 de diciembre como tercer entrenador del Tenerife en esta 24/25. Óscar Cano y Pepe Mel fueron sus antecesores. Desde su llegada, le ha dado otra cara al plantel.
El enfado del Tenerife con los arbitrajes
Bajo el mando de Cervera, el Tenerife ha logrado 22 de las 33 unidades que posee en su haber. La buena racha de los últimos encuentros les permite soñar con una salvación que aún sigue siendo complicada. El conjunto chicharrero podría haber sumado más puntos a su casillero de no ser por las polémicas jugadas en las que intervino el videoarbitraje.

El míster quiso ser contundente tras el Deportivo-Tenerife del pasado domingo. En dicho encuentro, el VAR intervino para revisar dos posibles penaltis a favor de los visitantes. Ninguno de los dos fue señalado. La semana anterior, se anuló un gol al atacante por un polémico fuera de juego posicional ante el Burgos.
«Estoy cansado de los árbitros, creo que no debemos hablar de ellos, no lo merecen. no me apetece hablar de ellos, no son los protagonistas aunque lo estén siendo»