A sus 26 años, el extremo andaluz Javier Ontiveros está firmando su mejor temporada en el fútbol profesional y está siendo uno de los futbolistas más determinantes en la categoría de plata
Pocos futbolistas son capaces de ser tan mediáticos como Javi Ontiveros en el Villarreal B. A sus 26 años, el extremo de Marbella se ha convertido en ‘meme’ en el fútbol español por jugar para un filial. Pero sobre todo por hacerlo con la inmensa calidad que atesora en sus botas. Tras años perdido, sin rumbo y sometido a numerosas críticas, el ‘10’ groguet se había propuesto recuperar su mejor versión este curso.
Y lo está cumpliendo al pie de la letra. De él depende gran parte de la permanencia de los chicos de Miguel Álvarez y de él mismo depende su futuro en la élite. Y por ahora va camino de conseguirlo.
@vibrasegunda 🪔 Ontiveros encendió la mecha en el Cartagonova con sus gestos 🦻 Una celebración efusiva que la afición del #Efesé consideró excesiva terminó con mucha polémica #laligahypermotion #futbolespañol ♬ sonido original – Vibra
Unas cifras que reafirman su condición
Ontiveros es uno de esos futbolistas que cada vez escasean más en el fútbol actual. Para empezar, por sus condiciones futbolísticas. Rápido, desequilibrante y con una calidad en sus botas impropia de esta Segunda División. A estas alturas del campeonato, el atacante del Villarreal B está firmando sus mejores cifras en el fútbol profesional, con siete goles y cinco asistencias. Además, también es determinante e influyente en otras muchas facetas.
🌟 Espectacular partido de Javi Ontiveros con el Villarreal B que va mucho más allá, por juego, de estos increíbles números
🔹 86 minutos
🔹 1 gol
🔹 4 ocasiones creadas
🔹 9 pases en último tercio
🔹 7 recuperaciones
🔹 0 pérdidas
🔹 1 tiro al palo¡Una pesadilla para el #RSG! pic.twitter.com/YGLqbpbtM3
— Vibra (@VibraSegunda) April 28, 2024
Es el futbolista con más disparos de la categoría, el atacante con más regates… Pero también es el jugador con más tarjetas (14) de la división de plata. Por lo tanto, Ontiveros también destaca por su personalidad. Esa que le ha permitido forjar un gran talento, pero también le ha pasado factura en algunos momentos de su carrera. Tras su gran año en el Málaga en la temporada 18/19, el atacante dio el salto a Primera División. Con el tiempo se demostró que aún no estaba preparado mentalmente para el desafío.
Un cambio mental necesario… y decisivo
Sin embargo, tenía claro que este tenía que ser su año. Por la confianza depositada en él. Por su edad. Y, sobre todo, por su situación contractual.
«El momento clave fue en pretemporada. Me machaqué mucho en verano y me mentalicé de que este tenía que ser el año. Es mi último año de contrato, noté que me había acomodado. Y me dije: si no es este año, no sé qué pasará el que viene», aseguró en una entrevista concedida a Relevo.
Con su futuro en el aire, Ontiveros ha sido capaz de sacar ese talento de Primera. El que durante varias temporadas había estado resguardado bajo el caparazón de su mente. Y el objetivo, tanto individual como colectivo, cada vez está más cerca. A falta de cinco jornadas, el Villarreal B se sitúa a tres puntos de una permanencia que hace semanas se veía casi imposible. El filial groguet ha dado un paso adelante en las últimas semanas. Y la contundente victoria –tanto por juego como por resultado– en El Molinón (0-3) así lo reafirma.
En su último servicio, Ontiveros quiere salvar al club. Y, de paso, conseguir un contrato que le permita vivir el sueño de Primera mucho más maduro que anteriormente. Él sabe que lo tiene, el mundo también. Ahora solo falta demostrarlo. Por ahora, y pese a las críticas, ya ha hecho lo más difícil: dar un paso atrás para intentar dar dos para adelante después. Mientras tanto, y haciendo honor al ya tan famoso meme, sigamos disfrutando de Ontiveros en el Villarreal B mientras podamos.