Álex Lozano, prometedor extremo de la cantera del Sporting de Gijón, ha sufrido un contratiempo que puede frenar su progresión. El joven futbolista ha sufrido una lesión muscular en el isquiotibial, ubicado en la parte posterior del muslo. Por ahora, está a la espera de pruebas médicas para confirmar el alcance y el tiempo de recuperación necesario.
La lesión que obliga a detener su avance
Según RSG Fichajes y La Nueva España, el susto se produjo durante los entrenamientos en Mareo, la base deportiva del Sporting. Los servicios médicos ya trabajan para valorar la gravedad del problema muscular. Esta lesión en el isquio es especialmente delicada para jugadores como Lozano, cuyo rendimiento depende de su velocidad y explosividad por la banda.
Álex Lozano ha mostrado un gran potencial en los últimos años, incluso fue internacional sub-19 con España. Su trayectoria incluye buenas temporadas en el filial y cesiones en clubes como Real Unión de Irún y San Fernando CD. Donde esperaba seguir ganando minutos competitivos. Sin embargo, esta lesión podría frenar su evolución al apartarlo de los entrenamientos y partidos por varias semanas.
Trayectoria y expectativas en el Sporting
Desde sus 17 años, Lozano ha sido una de las jóvenes promesas del Sporting. Destacó en el filial con goles y desborde, llamando la atención de entrenadores como Dani Mori. Este último ha elogiado la calidad, carácter y físico del extremo, confiando en que pueda alcanzar un nivel profesional alto.

La temporada anterior, Álex logró consolidarse con buenas actuaciones en el filial y algunas convocatorias al primer equipo. Además, su cesión al San Fernando CD le permitió acercarse a la categoría profesional. Aunque la falta de continuidad en el Real Unión de Irún fue un inconveniente que su cesión en San Fernando buscaba corregir.
Futuro incierto y valoración del club
El Sporting estudia ahora la situación de Álex Lozano. Teniendo en cuenta su contrato vigente hasta junio de 2026 y el contratiempo de la lesión. La entidad deberá decidir sus próximos pasos en función de la recuperación y su reintegración al grupo.
El joven extremo, que todavía tiene mucho margen de mejora y maduración, tendrá que superar este obstáculo para demostrar su nivel y seguir peleando por un puesto en la plantilla principal. Por el momento, la prioridad es asegurar su recuperación óptima y evitar recaídas que podrían suponer un parón prolongado en su carrera.