El CD Mirandés se encuentra en un día que puede quedar escrita con letras de oro -o de plata-. Una noche para la historia del club. Recibirá el conjunto jabato al Racing de Ferrol en Anduva. Hasta aquí nada de especial, un partido más, seguramente. Aunque no lo es, ni para unos ni para otros. Los visitantes, acuciados por la necesidad. En zona de descenso y cada vez con menos jornadas para reaccionar. Los locales, haciendo historia. Y más que pueden hacer.
Cita con la historia para el Mirandés de Lisci
Con 45 puntos, el CD Mirandés llega a la Jornada 27 metido en zona de playoff, a 3 puntos del liderato. Y a tan sólo uno de zona de ascenso. El encuentro que le mide a los ferrolanos es el que abre la fecha y, por tanto, ofrece la oportunidad a los pupilos de Lisci de colocarse en primera posición de la tabla. Un hito para el club, ya que sería la primera vez que el equipo se colocaría en dicha posición en Segunda División en su historia.
Esta oportunidad se encuentra supeditada a dos cuestiones. Una, ineludible, vencer el encuentro para así igualar los 48 puntos del Racing de Santander. La segunda, que la victoria se produzca por una diferencia superior a un gol. Con esa segunda variante, mejoraría el goal-average general de los cántabros y sería líder de pleno derecho. Todo ello, claro, pendiente de los resultados que se produzcan después en el resto de la jornada.
En cualquier caso, esos tres puntos lo que sí que harían sería dejar al Mirandés a tiro de un partido de alcanzar los 50 puntos. Y asegurar así el primer objetivo del equipo: la permanencia. Una noche para la historia jabata la de este día de San Valentín en Miranda de Ebro.
