El CD Mirandés está realizando una temporada extraordinaria. Inesperada, también. Mucho se ha escrito y se ha analizado sobre el tema. Partiendo del convulso verano, en el que el mercado fue despacio. En el que se tuvo que suspender un partido por falta de jugadores en pretemporada.
Un Mirandés que crece desde la defensa
En tal contexto, también se ha venido analizando la importancia del trabajo defensivo del equipo. Lo que sí que hizo el Mirandés fue firmar jugadores empezando por atrás y yendo hacia arriba. La defensa ha sido la parcela más trabajada y el equipo ha crecido desde ahí. En tal contexto, el club jabato ha terminado siendo una de las grandes sorpresas de la temporada. Una sensación, sin duda.
Y la clave para que el equipo rojillo esté en la situación en la que está es clara. Se trata de un equipo que no ha encadenado en toda la temporada dos derrotas. La primera ocasión podría producirse, precisamente, esta semana. Será el lunes cuando el Mirandés cierre la Jornada 29 de LaLiga Hypermotion recibiendo al CD Tenerife. Vienen de perder en el Ciutat de Valencia, por lo que la posibilidad existe.
La fiabilidad del equipo de Lisci
El caso es que el CD Mirandés de Alessio Lisci es un equipo realmente fiable. El segundo equipo menos goleado de la competición ha logrado que dicha condición le lleve a situación de privilegio. Tan sólo le separan dos puntos de los 50 que eran el objetivo a inicio de temporada. Los puede alcanzar en la jornada 29. Y por delante quedarán nada más y nada menos que 13 partidos. Los 12+1 de la ilusión por un sueño inimaginable.
