El mercado de fichajes nunca descansa. Y en la sala de máquinas del Cádiz CF ya suenan nombres con fuerza. Uno de ellos es el del joven Oier López, lateral zurdo de 23 años que milita en el Barakaldo. Con un perfil que recuerda al del actual defensor sevillano José Joaquín Matos, el club andaluz se guarda una carta en la manga por si el verano cambia los planes.
Aunque Matos aún tiene un año más de contrato, el Cádiz no quiere verse sorprendido. A sus 30 años, su continuidad no está asegurada. Y en la planta noble del club ya se estudian alternativas que garanticen solidez y frescura por el costado izquierdo. En ese horizonte aparece Oier, una promesa que ha brillado con luz propia en la Segunda RFEF. Así lo ha informado el periodista JM Merino.
Un perfil que encaja con la filosofía cadista
El joven lateral vasco no solo destaca por su juventud. También por su capacidad para recorrer la banda con constancia, valentía y rigor defensivo. Su estilo recuerda al de Matos. Solidez atrás, buena lectura táctica y capacidad para sumarse al ataque con sentido. El Cádiz lo ve como una opción de presente con visión de futuro.
Además, Oier López se ha consolidado como uno de los jugadores más regulares del Barakaldo. Su rendimiento no ha pasado desapercibido en los despachos del Nuevo Mirandilla. Gusta su madurez pese a la edad y su hambre por crecer. No sería una operación costosa, lo que también facilita su posible incorporación.
Una decisión que dependerá de los movimientos del verano en el Cádiz
Todo dependerá de lo que ocurra con Matos en las próximas semanas. Si llega una oferta interesante o el propio jugador busca un nuevo reto, el Cádiz ya sabría por dónde empezar a construir el relevo. En ese escenario, Oier ganaría enteros y podría dar el salto a un proyecto ambicioso como el amarillo.
Por ahora, no hay nada cerrado, pero el interés existe. El Cádiz se mueve con cautela, como un ajedrecista que protege su flanco izquierdo antes de lanzar el ataque. Oier López representa esa ficha joven, lista para entrar en el tablero si las circunstancias lo exigen.
