El Granada comienza a perfilar su nuevo proyecto tras un curso complicado. La dirección deportiva ha puesto el foco en reforzar una posición clave: la portería. Y según informa el Diario Ideal, el elegido para compartir el arco con Luca Zidane ya tiene nombre y apellidos. Se trata de Ander Astralaga, actual guardameta del filial del FC Barcelona, que llegaría cedido para la temporada 2025-26.
Astralaga, de 20 años, ha sido una de las piezas más destacadas del Barça Atlètic esta campaña. Su madurez bajo palos, su juego de pies y su capacidad de liderazgo han llamado la atención de varios clubes de LaLiga Hypermotion. Pero el Granada se ha movido rápido y ya tendría encarrilada su cesión, a falta de detalles por cerrar con el conjunto culé.
Una apuesta con proyección y ambición
El joven portero vasco no llega para ser suplente. La idea del club nazarí es clara: generar una competencia real con Luca Zidane para elevar el nivel de la portería. Una pelea que, en clave deportiva, puede beneficiar a ambos y asegurar garantías en una posición vital para cualquier aspiración de ascenso.
Astralaga está llamado a ser uno de los grandes porteros del futuro. Habitual en las convocatorias de la Selección Española sub-21, acumula experiencia en escenarios exigentes y tiene el perfil moderno que tanto gusta en el fútbol actual. Salida de balón, reflejos, temple. El Granada apuesta por presente… pero también por lo que está por venir.
El Granada refuerza su muro defensivo
Con este movimiento, el Granada no solo busca mejorar una posición. También envía un mensaje: el proyecto va en serio. Después de una temporada con altibajos, se pretende construir desde la seguridad. Y eso, en el fútbol, empieza por el portero. El dúo Astralaga-Zidane promete ser uno de los más interesantes de la categoría.
A falta de oficialidad, el acuerdo con el Barça estaría prácticamente cerrado. El club andaluz confía en sellarlo en los próximos días, para que el portero pueda iniciar la pretemporada a las órdenes del nuevo cuerpo técnico. La portería rojiblanca ya tiene nuevo inquilino en el horizonte. Y la competencia está servida.
