Se cierra junio y con él llegan los primeros capítulos del nuevo ciclo en el Sanse. El filial txuri-urdin ha oficializado las dos primeras salidas de su plantilla para la temporada 2025-26. Se ha despedido de Manex Gibelalde y Eder García. Se trata de dos nombres que han formado parte del engranaje del equipo en los últimos cursos. Y que ahora emprenden caminos diferentes lejos de Zubieta.
Especialmente significativa es la marcha de Manex Gibelalde, cuya salida no solo representa una pérdida deportiva, sino que añade un componente emocional extra. El central firma por el Athletic Club, eterno rival institucional y sentimental. Un movimiento que sorprende por el contexto y el simbolismo. Aunque el jugador, de 22 años, busca ahora consolidarse en un entorno distinto, quizá con la mirada puesta en la élite.
El Sanse se despide también de Eder García
Por su parte, Eder García también pone punto final a su etapa en el Sanse. El centrocampista, que ha ofrecido equilibrio, despliegue y compromiso desde la medular, termina contrato y ya estudia nuevas oportunidades de futuro. Aún no se ha hecho público su próximo destino. Pero su salida deja otro vacío en el proyecto formativo de la Real Sociedad.
Ambos jugadores han sido parte del proceso natural de renovación que vive cada año el filial, donde la formación y la promoción se entremezclan con los cambios inevitables. En este caso, se trata de dos piezas con bagaje y peso específico en el vestuario, lo que convierte sus despedidas en algo más que una simple anotación en la hoja de salidas.
Una nueva etapa para el Sanse… y para ellos
Para Manex, el paso al Athletic supone un reto de máxima exigencia. En Lezama ya ven en él un zaguero con perfil de futuro, mientras que en Zubieta se marchará con la mochila cargada de minutos, experiencia y el reconocimiento de un trabajo silencioso pero constante. Eder, por su parte, buscará un equipo donde pueda seguir creciendo y demostrando que está preparado para metas mayores.
El Sanse, mientras tanto, comienza a dibujar el lienzo del próximo curso. Con juventud, con nuevas ilusiones y con esa mezcla de orgullo y nostalgia que siempre acompaña a cada adiós. Porque en los filiales, cada marcha también es una victoria del camino recorrido.
Zubieta despide, pero nunca olvida
Empieza el verano en San Sebastián y las despedidas ya son oficiales. En Zubieta, el ciclo sigue, y aunque el balón no se detiene, cada nombre que se va deja una huella. La del talento que creció allí, aunque hoy emprenda vuelo en otra dirección.
