Semana clave en el entorno del Racing de Santander. El presidente del club, Manuel Higuera, ha salido al paso para disipar cualquier tipo de duda sobre el rumbo del proyecto de cara a la próxima temporada. En una comparecencia inesperada, el máximo mandatario verdiblanco ha confirmado la continuidad de José Alberto López como entrenador. Y de Mikel Martija como director deportivo. Independientemente de si el equipo logra o no clasificarse para el playoff de ascenso.
El mensaje busca calmar las aguas en un tramo decisivo del curso. El club cántabro pelea por un billete a la fase final por el ascenso a Primera. Pero los últimos resultados habían sembrado ciertas dudas. Ante ese escenario, Higuera ha querido actuar con firmeza. Respaldando a las dos figuras más visibles del proyecto deportivo. Y trasladando confianza a la plantilla y afición.
Un respaldo que apunta a la estabilidad en el Racing
La ratificación llega en un momento delicado, pero también oportuno. La dirección del Racing entiende que apostar por la continuidad, más allá del resultado final de la temporada, es clave para dar estabilidad y reforzar la estructura del club. José Alberto ha sido protagonista de una campaña notable. Con un estilo reconocible y una apuesta decidida. Martija, por su parte, ha sido responsable de confeccionar una plantilla competitiva en un mercado complejo.
Esta decisión estratégica permite mirar al futuro con más certezas. El Racing se juega mucho en la última jornada. Pero ya tiene una hoja de ruta clara. Pase lo que pase en el césped, el club ha marcado su línea. Continuidad, confianza y un proyecto con bases sólidas para seguir creciendo.
