El Granada CF trabaja con intensidad en la configuración de su nuevo proyecto. Tras una temporada de turbulencias y cambios, el club nazarí quiere dar un paso firme en el mercado estival. Y lo está haciendo con dos nombres marcados en rojo en su lista de prioridades. Souleymane Faye y José Arnáiz, dos perfiles distintos, pero con un mismo objetivo: reforzar el ataque con garantías.
Faye, delantero senegalés de 22 años, ya estuvo en el radar del Granada durante el pasado mercado de invierno. Su rendimiento con el Betis Deportivo, donde ha firmado 9 goles y 4 asistencias en 36 partidos en Primera RFEF, ha llamado la atención. Lo ha hecho por su potencia, velocidad y capacidad de desborde. Ahora, su nombre vuelve a la mesa con fuerza. Y la dirección deportiva se ha activado para tratar de cerrar su incorporación.
Un viejo deseo y una apuesta segura para el Granada
El otro gran objetivo es José Arnáiz. Un jugador de sobrada experiencia en la Segunda División y que ha dejado detalles de calidad también en Primera. Termina contrato con Osasuna. Y su situación contractual le convierte en una oportunidad interesante, aunque no exenta de competencia. El Granada ya ha mostrado interés y estaría pendiente de las condiciones para lanzarse de lleno por su fichaje.
Arnáiz aportaría desequilibrio, llegada desde segunda línea y experiencia en escenarios exigentes. Pese a que no se trata de una operación sencilla, Pacheta lo ve como un refuerzo diferencial. Ideal para dotar de talento al frente ofensivo de un equipo que busca regresar cuanto antes a la élite del fútbol español.
Construyendo un equipo competitivo
La idea del club pasa por conformar una plantilla equilibrada, con juventud, calidad y experiencia. Faye representa el futuro con presente. Mientras que Arnáiz puede ser ese jugador determinante en los momentos clave. El Granada no quiere dejar cabos sueltos en su planificación. Y ambos jugadores son considerados estratégicos para el nuevo curso.
El mercado avanza, y con él, las negociaciones. En las oficinas de Los Cármenes saben que las decisiones tomadas en junio pueden marcar el desenlace de la temporada en mayo. Por eso, cada paso se mide, se analiza y se ejecuta con la convicción de quien sabe lo que busca. Y ahora, Granada busca gol, desequilibrio y carácter.
