Ha sido un último día de mucho papeleo en las oficinas del Burgos CF. Si en la tarde se anunciaban llegadas en la medular, la noche quedó para la traca final. Y es que la dirección deportiva encabezada por Michu cerraba la llegada de un central de proyección y un delantero, conocido del míster. Ambos, ahora sí, son los últimos refuerzos de la temporada para el club burgalés.
Elady Zorrilla, de vuelta en Segunda de la mano del Burgos
Elady es un viejo conocido de la categoría. Uno de esos futbolistas carismáticos que necesita nuestro fútbol. El futbolista jiennense se dio a conocer en Cartagena. Progresó a Tenerife, aportó en Huesca y ahora regresa a LaLiga Hypermotion con el Burgos. El atacante inició la temporada en el Intercity, donde ha anotado un gol y repartido una asistencia en 15 encuentros.
Estamos ante un futbolista que a sus 35 años tiene claro cuál puede ser su papel en el equipo. Un jugador que no escatima un esfuerzo, de carácter, carisma y bien aliado con el gol. Luis Miguel Ramis le conoce bien y vuelve a apostar por su figura. El de La Puerta de Segura es precisamente eso, un seguro en cuanto a rendimiento se refiere y un futbolista de los que proyecta al entrenador en el campo.
Milicic, un central joven y poderoso
Y, por último, el Burgos suma a su zaga a un futbolista eminentemente físico. Con tan sólo 20 años, Nikola Milicic sabe lo que es competir asiduamente en la primera división de su país, Serbia. Pertenecía al Partizán de Belgrado, con el que rescinde para firmar con el Burgos hasta 2027. Internacional sub-21, es uno de los valores serbios de mayor proyección.
Se trata de un central contundente con un gran juego aéreo, lo que supone un perfil diferente a lo presente en la zaga burgalesa. El futbolista se pone a las órdenes de Ramis de inmediato, con la vista puesta en aportar desde el principio en su nuevo club.